Un petit four (expresión francesa; en plural: petits fours) ( pasteles en España y masas finas o masitas en Argentina, Uruguay, Paraguay y Bolivia ) es un pastel de pequeño tamaño, dulce o salado, de la repostería francesa. Por regla general son de unos pocos centímetros de tamaño y llevan una decoración en miniatura acorde con su reducido tamaño. Se suelen servir tradicionalmente en cócteles, aperitivos, meriendas, tomando café y en menor medida al final de las comidas.
El nombre francés significa " pequeño horno ", una expresión que se podría traducir por " horno lento" ( de la misma manera "a fuego lento" se dice tradicionalmente à petit feu). Esto es debido a que antiguamente los pasteleros aprovechaban el calor remanente en el horno después de haberlo apagado para hornear pequeñas piezas que no habrían aguantado el calor del horno a pleno rendimiento.
La gastronomía contemporánea ha ido adaptando los petits fours a los gustos y costumbres culinarias de cada país empleando recetas e ingredientes locales, por lo que un petit four es más un concepto gastronómico que un conjunto cerrado de recetas en sí.
Los petits fours son piezas diseñadas y cocinadas ex profeso en función de su pequeño tamaño. La decoración y la presentación son muy cuidadas, y sus características dependen de la imaginación del pastelero. La versión en miniatura de piezas habitualmente más grandes como los pepitos y las tartaletas, o las pizzas y las quiches, se llaman mignardises y no son estrictamente petits fours.
La fama internacional de los petits fours ha llevado a generalizar esta categoría incluyendo en ella muchas piezas de pequeño tamaño que pertenecen a otras clases de preparados.