La nieve es resultado de un fenómeno meteorológico que consiste en la precipitación de pequeños cristales de hielo. Los cristales de nieve adoptan formas geométricas con características fractales y se agrupan en copos. Está compuesta por pequeñas partículas ásperas y es un material granular. Normalmente tiene una estructura abierta y suave, excepto cuando es comprimida por la presión externa.
La nieve es el vapor de agua que experimenta una alta deposición en la atmósfera a una temperatura menor de 0 °C y posteriormente cae sobre la tierra.
Se clasifican las nevadas dependiendo de la tasa de caída de nieve, la visibilidad y el viento.
Nevada débil: Cantidades inferiores a medio centímetro de espesor por hora y la visibilidad es superior a un kilómetro. Si la nevada es breve entonces se trata de una nevisca.
Nevada moderada: Cae de 0.5 a 4 centímetros por hora y una visibilidad que fluctúa entre 500 y 1000 metros.
Nevada fuerte: Cae más de 4 centímetros por hora y la visibilidad es inferior a 500 metros.